Cuando ruge la tierra

Durante casi tres meses la erupción de un volcán ha cambiado para siempre la fisonomía de la isla canaria de La Palma

Como si de modernas plagas de Egipto se tratase, tras una epidemia y el paso de Filomena, otro fenómeno natural sobresaltaba a los españoles, y es que uno de los volcanes que dieron origen a las Islas Canarias entraba en erupción poniendo en alerta a los vecinos durante casi tres meses y cambiando para siempre la fisonomía de la isla de La Palma.

Tres meses en los que las impresionantes imágenes del Cumbre Vieja han sobrecogido y fascinado por igual a todos. Y es que la fascinación por el fuego es una constante desde la antigüedad. Hefesto, reconvertido en Vulcano por los romanos, convirtió las entrañas del monte Olimpo en una gigantesca fragua donde el fuego, el azufre y la ceniza serán sus compañeros. Esta imagen de la fragua ardiente en el interior de una montaña inspirará, en plena Edad Media la iconografía clásica del infierno, que perpetuarán leyendas como la de Pedro Botero en la España del Siglo de Oro.

Pero más allá de la leyenda, las explosiones volcánicas tienen mucho de mágico, al mostrar lo pequeño que es el ser humano en comparación con las fuerzas naturales. Catástrofes como la del Vesubio, que enterró la ciudad romana de Pompeya; el Toba, que a punto estuvo de extinguir la raza humana hace 75.000 años; el Krakatoa, que alteró el clima del planeta durante cinco años; la llamada Erupción Minoica, a la que se atribuye el hundimiento de
la Atlántida; o el Tambora, que provocó una nube de cenizas tal que dejó sin verano a toda la Tierra en 1815, son sólo algunos ejemplos del enorme poder destructivo de las chimeneas del interior de la Tierra.

Y es que un volcán es exactamente eso, una gigantesca chimenea por la que se escapa el magma cuando la presión alcanza un punto crítico. Pero no todas las erupciones son explosivas, como ocurre en Hawai, donde el magma llena el cono del volcán y va escurriéndose por la ladera de forma pacífica. Los volcanes de Canarias, históricamente, han tenido erupciones de tipo estromboliano, con un nivel de peligrosidad bajo en comparación con otros volcanes, pero que han ido construyendo, a lo largo de los milenios, el archipiélago que conocemos.

Así, las islas más antiguas de Canarias son Fuerteventura y Lanzarote, con una edad de más de veinte millones de años; mientras que las “recién nacidas”, El Hierro y la Palma, tienen menos de dos  millones de años. Es precisamente en ellas donde se han registrado los últimos episodios eruptivos, y los vulcanólogos consideran que es justo debajo de ellas donde se encuentra el “punto caliente” de la placa tectónica que cruza el Atlántico, una placa que se desplaza hacia el Este, lo que en un futuro muy lejano puede crear nuevas islas en el archipiélago canario.

Pero en la actualidad el único foco de interés en España es, precisamente, las Islas Canarias, ya que, para encontrar una erupción en otra zona del país hay que remontarse hasta hace 13.500 años en la comarca de La Garrotxa de Girona. En Canarias la actividad volcánica es bastante más reciente, pues la explosión del Cumbre Vieja es la vigésima desde que se tienen registros, allá por el siglo XV, ocho de ellos registrados en la isla de La Palma.

Sin embargo, la última erupción registrada antes del Cumbre Vieja es la del volcán Tagoro en la isla del Hierro, una erupción submarina que se produjo en 2011 y duró 147 días. La anterior sí tuvo bastante más repercusión, y también se produjo en La Palma.

Corría el año de 1971 cuando entraba en erupción el volcán Teneguía, una nueva fisura que nació en la, por aquel entonces, llanura de Cumbre Vieja, y que, tras dos meses de erupción, amplió la isla en casi dos millones de metros cuadrados. A diferencia de lo ocurrido con el de Cumbre Vieja, el Teneguía si dejó dos muertos, aunque no por la explosión, sino por la inhalación de humos que sufrieron dos visitantes que rompieron el cordón de seguridad para acercarse al nuevo cono.

Y es que la erupción del Teneguía fue, sobre todo, un gran acontecimiento turístico. El tardofranquismo, empeñado en vender España como destino turístico único en el mundo, no dudó en convertir la erupción en un auténtico espectáculo para visitantes: carreteras cortadas por los atascos, pescadores que alquilaban sus barcas a los turistas; y un constante trasiego de curiosos convierten a La Palma en una atracción durante los 24 días que duró la erupción.

El de Cumbre Vieja, sin embargo, no ha sido una atracción turística. Probablemente debido a la epidemia, o a la enorme emisión de gases y cenizas, que ha hecho que existiera riesgo de lluvia ácida, las previsiones iniciales de convertirlo en foco de atracción no se han cumplido.

Y así, 86 días después de comenzar la erupción, las autoridades daban por terminada la crisis al pasar más de diez días sin actividad volcánica. En concreto, el episodio comenzaba el 19 de septiembre de 2021, y se daba por concluido el día de Navidad. En el  ínterin más de 1.200 hectáreas de la isla han quedado cubiertas por la lava, y se han vertido 159 millones de metros cúbicos de lava. Además, la explosión ha provocado que la montaña de Cumbre Vieja haya crecido en los últimos meses y presente un aspecto mucho más escarpado.

“El volcán de La Palma, cuya erupción se ha dado por finalizada oficialmente este 25 de diciembre, tiene un edificio volcánico de unos 200 metros de altura sobre su base, con una altitud total de aproximadamente 1100 msnm (metros sobre el nivel del mar), en torno a una fisura eruptiva visible desde el cielo, con al menos 6 cráteres”, resumía en un post el INVOLCAN.

La nueva isla de La Palma mide 43 hectáreas más que hace tres meses, y durante el episodio se han destruido casi tres mil edificios, y otros tres mil han resultado dañados. Miles de vecinos se han visto afectados por la erupción, y 2.300 de ellos han perdido sus hogares.

Y es que cuando la fragua de Vulcano se activa abre una puerta al infierno que muestra lo insignificante que es el ser humano en comparación con las fuerzas naturales.

Samuel Román
eltelescopiodigital.com